Titivillus, el demonio culpable de las faltas de ortografía.
Un demonio enano, feo, cargado con una pila o un saco de libros a la espalda llamado Titivillus era en el Medievo según el folclore cristiano el culpable de las faltas de ortografía, los errores tipográficos, la mala pronunciación, el tartamudeo… en fin, todo aquello que pudiera «obstaculizar» la claridad del mensaje. Aunque existen referencias más antiguas, … Leer más